lunes, 30 de junio de 2008

Urocopa y Urogallos


Uno no es muy de fútboles que digamos, no me duele en prendas reconocerlo, como tampoco me duele admitir que en ciertas escenas del espectáculo me sudan las manos, me se dispara la taquicardia y puedo llegar a la franca conclusión de que la madre del árbitro se ganaba las habichuelas en la puta calle meneando un bolso.

Después me vienen los remordimientos. No resulta fácil ceder al convencimiento de que el residuo reptiliano de mi cerebro ha logrado imponerse al mamífero durante unos minutos que se hacen interminables. Lo sé porque me quedo frío, la mirada inexpresiva, las manos engarrotadas, quieto como un camaleón y en esos instantes puedo comerme al que se me ponga por delante.

Tras la mencionada enajenación mental transitoria, uno vuelve a ser discípulo, el peor discípulo, de Da Vinci. Y es que como mi visión periférica es mucho mejor que la directa, pues no puedo dejar de percibir ciertos detalles y extraer determinadas conclusiones. Fuera, éso sí, de los términos estrictamente furbolísticos.

Por más vueltas que le doy, ayer, mientras el mundo veía la celebración de un triunfo "deportivo", por así llamarlo, a mí me pareció percibir en los semblantes germanos una ceremonia de humillante capitulación, rictus amargos y rencor malamente contenido contra la insultante hilaridad de esos íberos neolíticos, esos hombres de atapuerca que les dejaron, en ese terreno, a la altura del culo.

El sentimiento de superioridad de la raza aria sigue vigente, como quedó patente en la expresión de esa prima de la Srta. Flecher que es Angela Merkel. Si el presidente del gobierno español hubiese sido Rajoy, pues no sé, Mariano tiene otro estar, otra cosa; tampoco habla un pijo de alemán pero ya se sabe que los candidatos del PP para esto de los idiomas no tienen complejos. Pero con José Luis la cosa se me antojó diferente. Tan tímido y dubitativo como siempre, extendiendo y encogiendo la mano presta a saludar, con su bambi-mirada a pleno rendimiento, cejas en posición de ataque-defensa y sonrisa de "a ver, qué hago".

En el bando político y deportivo alemán, que eran todos menos los españoles porque incluía a los anfitriones, a Platini y a los árbitros, se respiraba una mala hostia que asusta. Y me asusta porque toda muestra de satisfacción era malamente fingida, con mucho esfuerzo, incluidos los representantes deportivos institucionales de esta Europa que, a la primera de cambio, se traslada al siglo XII.

Repasen ustedes las imágenes que se repetirán hasta la saciedad, y vean a esa Merkel con su ying y su yang, con su Jekill y su Mr. Hyde felicitando protocolariamente a los bárbaros, como un César entregando Roma.

Está la cosa como para pedir aumento de las subvenciones al olivar.

sábado, 28 de junio de 2008

El Corte Inglés, Fujitsu, Heineken y Seguros Ocaso fichan por GE- INRI.

Agencia de Noticias JEFE. 27-06-2008. El Corte Inglés, Fujitsu, Heineken y Seguros Ocaso fichan por INRI.

Ante el estupor de los mercados bursátiles, la multinacional italiana GE-INRI ha absorbido varias firmas entre las que se encuentran algunas hasta ahora tan solventes como El Corte Inglés, Fujitsu, Heineken y Seguros Ocaso, entre otras.

No es la primera vez que INRI lleva a cabo operaciones similares. ACME, holding dedicado igualmente a recrear aventuras de personajes de ficción, ya fue prácticamente barrida del mercado mediante la conocida estrategia del Grupo de Empresas INRI de quemar literalmente a la competencia, combinada con el lanzamiento de la modalidad más agresiva de OPA, la llamada OPA BOBA, a través de la que obtiene desorbitadas cantidades de activo de los recursos públicos en concepto de subvenciones.

En esta ocasión, el Consejo de Administración de INRI ha fijado su objetivo en el grupo dedicado a espectáculos de humor político y variedades LA SEXTA, en la que ha encontrado una competencia directa y feroz por la similitud de contenidos y que se ha revelado como una seria alternativa a la baza editorial que catapultó a INRI a la cima de los emporios financieros, titulada NUEVO TESTAMENTO, y que conforma la segunda entrega de un best-seller anterior, extenso compendio de cuentos infantiles de copyright compartido.

Así pues, serán los consumidores quienes tengan la última palabra.

miércoles, 25 de junio de 2008

Canon Analógico

La mayor parte de vosotros no lo recordareis porque, o bien no lo conocísteis por juventud, bien lo olvidásteis por deterioro senil, bien porque ya intuíais que lo de trasegar series de TV de pé a pá sin despegar la almorrana del sillón no prometía salud física ni bienestar mental.

Hablo de Canon, un detective analógico que habitó en los albores de la caja tonta y para el que, a pesar de sufrir la condena de la silla de ruedas, no existían las barreras, ni arquitectónicas ni de alguna otra clase.

Su apariencia despejada, rolliza y bonachona sumada a su minusvalía física generaban tal exceso de autoconfianza en sus antogonistas, que cuando querían acordar la suspicacia del postrado policía ya había liquidado toda coartada y minado la moral del presunto delincuente, que se entregaba tan resignado como sorprendido, o lo uno como causa de lo otro.

Y si, como en la foto, no había otro remedio, Canon esgrimía su "pipa" sabedor de su efecto disuasorio, y ahí acababa el asunto. Todos nos habíamos divertido y los malos, al trullo, que por aquél entonces era su sitio natural y no cabían recursos de amparo, apelaciones ni gaitas.

Pero los tiempos han cambiado y el Canon de hoy se esfuerza por mantener aquella imagen de inválido inofensivo, saqueado, incomprendido y digital como los nuevos tiempos, y cuando la sensiblería le falla, a falta de honesta inteligencia, echa mano de la "pipa" política y apunta a diestro y siniestro, confundiendo ciudadanos con delincuentes y viceversa.

Este nuevo Canon, es de padre putativo elegido por el sistema del que cagó la paloma y de entre los más trasnochados y ostentadores del récord a la baja en número de discos vendidos en los últimos 20 años. Canon hijo de petardos cuya musa voló con el coche de Carrero Blanco; hijo futuro que será quizás del Lalala, cuando Massiel tome el relevo de un fósil y descatalogado Teddy Bautista luciendo la tripa asanguijuelada y pujada de sangre de pardillos, y ya harto, repleto y eructado, se largue a retozar con el rey del pollo frito. Y que pase el siguiente.

Y no te enerves, Sabina. Que cuando termines por cascar el cascarón resquebrajado de tu voz que adoro, cuando tus versos acaben de empeorar y entren en fase terminal, a pesar de que no reúnes los requisitos mínimos de olvido público y falta de talento, cabe la posibilidad de que el pecio que por ese entonces ejerza la paternidad del Canon te legue la jeringuilla extractora de honor y los consejos de quien te precedió: ríe, reza, chupa, disfruta y simula esplendor.

Y conste que éste que escribe ni escatima el Canon, ni mantiene huidizos chinos, ni aplomados negros, negros como la conciencia de cándidos tontorrones que se regocijan, ilusos, en que roban y estafan porque a hurtadillas engullen gigas de video basura Entertainement, Columbia o Pictures, por el tobogán de la banda ancha por la que les cobran los tres ojos de su anatomía y que, sin la golosina del Emule, estaría francamente de sobra, por exagerada; y les clavan in situ los auténticos derechos de autor, los 40 eurazos mínimos al mes con los que podrían arramblar con todos los DVDs del kiosko -y la vuelta me la da en LIBs-.

¿Quien si no, las suministradoras de servicios de internet, se lleva la parte del león de la piratería audiovisual?

¿O es que tú comprarías 6 megas de banda para leer un blog?

martes, 24 de junio de 2008

La Maldición.

Una antigua maldición atribuida a los/las gitanos/as decía algo así como jalá te dé un doló que cuanto mah corra mah te duela, y si te párah revienteh.

Pues ha resultado que así es como funciona el mundo desde hace siglo y medio, en una continua huida hacia delante y sin la posibilidad de detenerse para darnos a algunos la oportunidad de bajarnos. Porque si se para de golpe, los que sobrevivan al frenazo se encontrarán perdidos en un lodazal ubicado en medio de ninguna parte, a bordo de un tren hundiéndose a marchas forzadas en un pantano de arenas movedizas. Ni más ni menos.

Este circuito que es tan cerrado como vicioso es el círculo, que se retroalimenta con una filosofía caníbal según la cuál si no dejamos de comernos entre nosotros moriremos de inanición, pero lo único comestible que tenemos a mano es el prójimo. Consumo se llama la maldición.

Pero la curiosidad mató al gato, y personalmente me muero por comprobar qué ocurriría si gastásemos lo necesario. Si, sin abandonar el circuito interminable, aflojásemos la marcha para darnos la oportunidad de contemplar el paisaje. Qué sorpresa si al mirar hacia arriba, descubriésemos media docena de tipos entre las sombras, fuera del círculo, individuos que se divierten poniendo y quitando raíles, añadiendo arbolitos, montando casitas, jugando con los potenciómetros de la corriente que alimenta las vías, inventando nuevos circuitos, nuevos primeros y terceros mundos.

Mira que si no fuesemos más que figuras de plástico en una inmensa maqueta, el pasatiempo de lujo de unos tipos que juegan a ser dios.

Cabe la posibilidad de que parar no equivalga a reventar. Cabe la posibilidad de que sólo nos lo estén haciendo creer. Cabe la posibilidad de que la consecuencia más real sea que se les termine la diversión y se vean descubiertos.

Como dice El Roto en una de sus viñetas más certeras: Si todos marchamos en la misma dirección, cómo sabremos si hay otro camino.

martes, 17 de junio de 2008

1945: Sodoma y Gomorra.

El ser humano es en sí mismo una máquina sorprendente, sobre todo en lo que a la percepción de la realidad se refiere y los procesos de ingesta y asimilación de la información. La Alemania de la segunda guerra mundial dejó de existir con la muerte del régimen nazi, el colapso político que acabó con su escisión y reparto entre los dos bloques ideológicos de la época; Alemania ha purgado hasta la saciedad durante estos sesenta años las pavesas de la barbarie por todos conocida.

Hasta la Iglesia Católica, a su manera, ha solicitado el perdón de los ciudadanos del mundo por la dilatada etapa histórica en la que sometió, aterrorizó y asesinó cruelmente a cientos de miles de seres humanos bajo los pretextos más inhumanos y retorcidos.

No es que fuese necesario, dado el amplio sector de las sociedades que justifica de una forma u otra sus procedimientos y que resulta suficiente para dotarla de inmunidad histórica. Pero el hecho reconocible y tímidamente plausible es que lo ha hecho, y la Europa lameculos y condescendiente lo positiviza y santas pascuas, aquí no ha pasado nada.

Pero el caso de los EEUU es, como poco, llamativo. Como sabemos, durante el último medio siglo ha capitaneado una cruzada contra lo que se ha denominado armas de destrucción masiva, iniciando guerras preventivas disfrazadas de cínico altruismo contra cualquier Estado soberano que le saque la lengua.

Se incorporó a la última Guerra Mundial cuando no le quedó otro remedio, habiendo permanecido hasta entonces observando taimadamente desde su atalaya cómo medio planeta era arrasado y sometido. Sólo cuando sus intereses y territorio estuvieron sobre el tablero de risk, intervino.

Sesenta años después y bajo la clarificadora perspectiva del tiempo, ¿hemos olvidado cómo acabó esa guerra? al margen del simple hecho narrativo, algún educador se ha atrevido a entrar en el análisis de lo que significa -una vez desintoxicados del buenismo con que a lo largo de estos años se ha impregnado el asunto- detonar dos Bombas H sobre dos ciudades de cientos de miles de habitantes? ¿Resulta éticamente aceptable que nadie señale con el dedo a quien ordenó el acto más monstruoso llevado a cabo contra la humanidad?

El aparato de marqueting de los EEUU es dispositivo de guerra más sofisticado creado hasta el día de hoy. Mientras los creyentes, en Occidente aún tiemblan cuando en las mañanas de domingo se les sermonea con la destrucción de Sodoma y Gomorra, miles de personas aún sufren los atroces efectos de la radiactividad de aquel fuego que también bajó del cielo y que les inoculó un mal que pasará a sus hijos y los hijos de sus hijos en incontables generaciones venideras.

Tácitamente, se nos enseña en las escuelas que no había otra forma de acabar con la conflagración, no se plantea la menor duda sobre el acto en sí mismo, de forma que no hay lugar para establecer un enjuiciamiento objetivo sobre un hecho contemporáneo de una gravedad sin precedentes.

Cierto es que EEUU no es el único que ha masacrado países enteros. Las guerras en Africa, la URSS y la actual Rusia, entre otros, demuestran lo contrario. Sin embargo, existe una diferencia fundamental. EEUU sigue paseándose por los foros internacionales como valedor de la justicia y defensor de la vida y la dignidad humanas, mientras su esencia, su filosofía y su moral colectiva sigue siendo la misma que aquél día no tuvo el menor atisbo de piedad con cientos de miles de seres humanos indefensos.

Aquella guerra, quién sabe si afortunadamente, la perdieron "los malos". Pero, ¿podemos estar seguros de que la ganaron "los buenos"?

miércoles, 11 de junio de 2008

¿Porqué en Italia?

La naturaleza está llena de casualidades. Un rincón en el patio, donde nunca llega el sol, en el cual la humedad tarda en evaporarse más que en cualquier otro lugar. Así que, cuando vas a acordar, ya tienes la dichosa verdina haciéndose dueña y señora de la situación, invadiendo toda superficie sometida a las mencionadas condiciones.

¿Casualidad? Pues posiblemente el mismo tipo de casualidad que hace que La Mafia y El Vaticano hayan confluido en ese rincón del patio mundial que es Italia. Observando detenidamente, las condiciones son análogas. La falta de luz que implica la religión, sumado al ambiente saturado que proporciona la Mafia. La proliferación de ambos en perfecta simbiosis responde a la necesidad y consecución de objetivos comunes, estructuras jerárquicas basadas en idénticos principios y métodos aprendidos mutuamente.

El Vaticano llegó antes, sus sagaces ideólogos, ya desde la antigüedad y tras catar alguna que otra sede provisional, decidieron establecer su centro neurálgico en esta tierra, poderosa y agitada al mismo tiempo. Muchos siglos antes de la invención de la televisión, los políticos de la época apreciaron rápidamente el poder que otorgaba la nueva ideología para el fácil manejo de las masas, con herramientas sociológicas muy simples.

Ambas, Mafia e Iglesia Católica, se complementan mutuamente a la perfección. Mientras la Iglesia, en origen, se excusa en la ganadería aplicada al ser humano, que es tratado socialmente como un rebaño, la Mafia siciliana se inclina por la agricultura como razón de ser, brindando ambas una protección que acaba siendo necesaria precisamente contra los mismísimos protectores.

Evidentemente, el éxito obtenido tanto por la Iglesia como por la Mafia no se debe a la vehemencia de su verbo, sino a la combinación de sutilidad con la oligarquía y brutalidad con los individuos no asimilables, que resultan desacreditados y despojados de sus bienes, cuando no simplemente asesinados, todo ello mediante técnicas que se han perfeccionado paralelamente al crecimiento institucional, económico, político y mediático de ambas organizaciones.

En Italia, encausar a un mafioso es una tarea laboriosa y casi siempre estéril. Juzgar y condenar a un miembro de la Iglesia por alguno de sus numerosos delitos tanto en el ámbito civil como en el penal, es imposible.

¿Dónde está la diferencia?

martes, 10 de junio de 2008

Heineken, la cerveza de los obispos.


El malestar creado entre los católicos por un programa de humor en La Sexta, ha tenido, entre otras, la inesperada consecuencia de que Heineken, uno de los sponsors del programa, retire la publicidad de su marca.

Por su parte, la respuesta de la ABC -Asociación de Bebedores Compulsivos-, de marcado carácter agnóstico, no se ha hecho esperar y ha comunidado oficialmente el veto alcohólico riguroso a Heineken, a lo que la conocida firma de cerveza ha respondido exigiendo al Vaticano que, en adelante, la Eucaristía se celebre exclusivamente con cerveza Heineken, siendo por tanto considerada en adelante patrocinador y complemento oficial de la ostia.


Por otra parte, la noticia ha servido para la localización fortuita de una página web, el Observatorio Antidifamación Religiosa, dedicado exclusivamente denunciar los intentos de difamar el buen nombre que la Iglesia Católica ha sabido mantener desde su fundación. De esta forma, el Muy Ilustrísimo Sr. Don Antonio Alonso Marcos, Presidente por Mandato Divino de dicho Observatorio, se yergue así en valedor en la Tierra de Nuestro Señor Jesucristo hasta su nueva venida, azote de herejes y plaga de comunistas, tarea que asume con absoluta abnegación y e
ntrega.

Desde este blog hemos querido saber más de este insigne benefactor de la Humanidad y, realizadas las oportunas investigaciones en la Internet, tan sólo podemos ofrecer dos posibilidades, dos ilustres nombres y apellidos que podrían encarnar, por igualdad de méritos, a la persona de este egregio ciudadano y sobresaliente católico.

Podría tratarse de un profesor de Doctrina Social de la Iglesia en la Universidad de San Pablo, pero conocido en los círculos intelectuales más exclusivos por su glosa al Discurso de Su Santidad Benedicto XVI al Cuerpo Diplomático acreditado en la Santa Sede, que ha marcado un antes y un después en la conceptualización de los protocolos consulares.

La segunda y última posibilidad gira en torno a la figura homónima de un Juez de Paz, doctorado en Relaciones Internacionales y catequista, que fue elegido juez de paz el pasado abril, habiéndose visto envuelto, desde entonces, en la polémica y la difamación más cruel tras negarse el pasado otoño a tramitar dos expedientes de matrimonios homosexuales en su ciudad, dado que, como es sabido, las bodas entre gays son inconstitucionales, lo que llevó al Ayuntamiento dela ciudad (PSOE) a celebrar un pleno urgente para pedir su dimisión. Una de las parejas perjudicadas terminó, en un alarde de cobardía, celebrando su boda en Canadá.

En consecuencia y dado que se trata de un ejemplo vivo del ideal de lo que debe ser un Cristiano y a fin de expresarle directamente nuestro reconocimiento y gratitud, desde este Blog rogamos a toda autoridad eclesiástica, civil, marca de cerveza, rioja e incluso a la universal Coca-Cola que dispusiese de información veraz al respecto, la notifique lo antes posible al remi
te de esta web.

Para finalizar, hacer un llamamiento a La Sexta para el cese de las hostilidades contra la Comunidad
Católica, animando desde aquí al personal que la integra a conocer a nuestro Señor Jesucristo y su mensaje, seguros que de la confusión de sus almas surge el mal que se plasma en programas desdichados como el emitido por la Cadena.

P
or lo tanto y con el objetivo de orientar los contenidos morales de esta joven emisora que, a pesar de los errores que conlleva su juventud, consideramos amiga, quedamos a su disposición para remitirles con toda humildad el código deontológico que ha venido marcando la intachable trayectoria moral de la COPE, como símbolo y guía de una radio y televisión impregnada de los valores cristianos de tolerancia y búsqueda permanente del enriquecimiento personal y espiritual del ser humano.