lunes, 8 de junio de 2009

Pobres superlativos

Recuerdo la pandilla de adolescentes enmedio de la calle, discutiendo a gritos cualquier asunto, ya fuese grave o intrascendente, alzando la voz a máximo volumen, pretendiendo ser escuchado como primer paso para llevarse el gato al agua. Un gallinero de caras con granos y sangre sobre-hormonada. El vejete octogenario de pelo ralo, cano, se detiene a la orilla del grupo luciendo una media luna divertida, gangosa y desdentada, sólo para decir: "no tiene más razón el que más grita". Dando la espalda, prosigue a pasitos rasos y cortos de pies y cayado. Servidor fue el primero en cerrar el pico.

Cuanto más inmundo y prescindible un reyezuelo, un tirano, un emperador, un monarca, más ampulosas sus obras civiles, sus monumentos dedicados, más soberbias sus tumbas y mausoleos, más suntuosos sus palacios.

Cuanto más pobre y escuálida una idea, mayor la retórica que la envuelve, ya sea para ocultar su banalidad, ya para magnificarla como una sombra china contra el inmenso muro de la necedad.

Por éso mucha gente expresa la sinrazón en mayúsculas. O cree encarnarse en vehículos imponentes. O viste trajes exclusivos como quien enfunda su debilidad en el acero protector de una armadura. O finge dignidad frecuentando casas cuyas puertas no abre la amistad, sino la alcurnia de la billetera.

Mejor no preguntarse qué mísero concepto nos observa desde la penumbra de las hornacinas y los umbríos rincones de los templos, las mezquitas, las catedrales...


El Diputhado Invisible

No le será fácil a Ud. dar con él en la prensa oficial, pero existe. La llamada abstención activa ha quedado como séptima fuerza en España, tras PP, PSOE, Coalición por Europa, IU-ICV, UPyD y Europa de los Pueblos-Verdes. Más de 220 mil votos desaparecidos en el fragor del combate.

Como siempre, nadie ha perdido. En todo caso, han ganado menos. En éso, los votos son como los euros de ganancia de los bancos. Las dos grandes Holdings Electorales, PP y PSOE, saben que ganarán y presupuestan en consecuencia, a sabiendas de que el margen de pérdidas o beneficios electorales será mínima, y saldable con las puntillas habituales: resultado menos positivo de lo esperado es uno de mis eufemismos electorales preferidos. Es elegante, difuso y revitalizador. Demagogia en estado puro.

No he echado números ni pienso echarlos, pero si Europa de los Pueblos, con unos 380 mil votos, tiene escaño, un buen trozo del escaño de alguien debe quedar en blanco con los 220 mil de los míos. Igual me da que el diputado en cuestión se arrincone durante toda la legislatura, o que le amputen un brazo y una pierna, o que dividan el escaño de forma que un tercio de éste sea inocupable.

Cualquier cosa menos obviar la voluntad de un número de ciudadanos equivalente a la población de una urbe de tamaño considerable.

Aunque, puestos a negociar, cambio los 2/3 de escaño por un titular en primera página en, por ejemplo, El País. Que diga: "El voto de reafirmación al Sistema y rechazo a la ausencia de ética política es el único que se duplica".

Qué menos.