Organizar luchas entre animales, con ánimo de lucro, vulnera ordenanzas y leyes, y conlleva sanciones administrativas y penales.
Organizar luchas entre un toro y un ser humano, con ánimo de lucro, no vulnera ordenanzas, ni leyes ni conlleva sanciones administrativas ni penales.
Luego tanto el ser humano como el toro, no son animales.
Nada como la lógica para disipar dudas y obtener conclusiones válidas.
Organizar luchas entre un toro y un ser humano, con ánimo de lucro, no vulnera ordenanzas, ni leyes ni conlleva sanciones administrativas ni penales.
Luego tanto el ser humano como el toro, no son animales.
Nada como la lógica para disipar dudas y obtener conclusiones válidas.
10 comentarios:
Muy agudo, Isaak.
También muy agudo ese brebe artículo de Millás del pasado viernes.
Salú
Ya conocía el artículo, Josefo. Millás es mi héroe, aquél que cualquier escribidor, aunque sea de tres al cuatro como es mi caso, querría ser de mayor.
Mucha salú también pa tí.
Buena puntilla.
Dicen que todos somos animales, lo que pasa que el hombre es animal racional y el resto irracional.
Ante esto pienso que el irracional y el verdadero animal, es el que maltrata y el resto disfruta y hace millonarios al resto de animales racionales.
Saludos
Efectivamente, no son personas. Son hombres, hechos a imagen y semejanza de Dios, con, como dice el catecismo: suputamadre, entendimiento y voluntad.
En los toreros esto se reconoce en como las de los sombreros les miran el bulto de la entrepierna, mientras que en los toros simplemente se reconoce por los cuernos.
Bendita la iglesia, que considera que tanto el toro como el hombre, al igual que el Cristo, deben poner la otra mejilla cuando les arrean. Su apoyo permanente a esta hermosa tradición ayuda a que se perpetúe nuestra fiesta nacional, y pueda así llegar a ser conocida por las futuras generaciones.
Una cornada amistosa...
¡Coño! se me coló un gazapo!
Quería decir: Efectivamente no son animales. Son hombres, etc.
Un par de banderillas cariñosas...
Pués a mí no me había parcido un gazapo, huelladeperro, es más me sigue pareciendo más acertada la primera versión que la corregida...
Mesié Asino, si el señor Millás le leyese, fijo q desearía ser como vos.
Estoy con Josefo (Hola niño!)muy agudo y exacto el razonamiento, el despliegue de premisas con la conclusión incluída está tautológicamente bordao.
chapeau!
saludos a la concurrencia (pues sí q ha habido juerga hoy aquí, y yo sin enterarme, jejejeje)
Madame Lisi, le agradezco la lisonja y me siento enormemente halagado, pero estamos hablando de Millás, el mismo que en el mundo del articulista es el hijo de un dios y un mortal, por lo menos... un Hércules de la sintaxis. Pruebe Vd. -si no lo ha hecho ya- con "Cuerpo y Prótesis", todo un manual de referencia para quien pretenda iniciarse en el mágico arte del ensayo breve y artículo de choque.
EN CUANTO a la entrada en sí, como ya habréis supuesto ha venido inspirada por la historia de las peleas de gallos, que tanto ha escandalizado a "la sociedad". En el caso de los toros, se da la circunstancia de que, biológicamente, están más cerca del ser humano que los gallos. A partid de ahí, sobran los comentarios.
Gracias a todos y un fuerte abrazo.
Y este artículo de Rosa Montero en "el País"? párate y mira
No se puede dejar más claro, ¿no?
En una plaza la humanidad se distingue enseguida. El toro es el mas cuerdo.
Un abrazo Isaak.
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