sábado, 22 de agosto de 2009

La Iglesia Católica ha sido, presuntamente, como esa cuñada aviesa: cometido el desmán, tergiversa hábilmente los hechos, y acaba logrando que las que fueron víctimas aparezcan como verdugos. Por éso acaban, presuntamente, por no distinguir entre una verdad revelada, y una verdad transformada.

2 comentarios:

calimeroesmalo dijo...

Bien se sabe como manipulan todo. Luego saca un tema que les salpique a colación. Uyyyyyyyyyyy!!!!
Uyyyyyyyyyyyyyyyyy!!!!!
¡ Se te echan encima y ni los ves venir!!!!
un abrazo Isaak!

Isaak dijo...

Un abrazo, Calimero. En el fondo son como niños, necesitan sus fantasías. El pobre consuelo de los inmaduros. En fin.